Secretario de la iglesia mundial ya jubilado hoy cumple 100 años

En aguda entrevista, agradece a Dios por su conducción; acaba de renovar su licencia de conducir

Silver Spring, Maryland, United States | Ansel Oliver/ANN

Clyde Franz, un directivo ya jubilado de la Iglesia Adventista que supervisó las estadísticas sobre los miembros y el reclutamiento de misioneros para cargos internacionales, cumple 100 años en el día de hoy.

Franz, que fue secretario ejecutivo de la denominación entre 1970 y 1980, espera celebrar su centenario con sus dos hijos, parientes y amigos que lo visitan desde varios estados.

“Todos están transformando esto en un gran evento, cuando en realidad, todo lo que he hecho es levantarme 36.000 veces, más o menos, y aquí estoy”, bromea en una entrevista telefónica desde su hogar en un hogar de ancianos de Hendersonville (Carolina del Norte, Estados Unidos). Entonces hace una pausa y dice con mayor solemnidad: “Debo agregar que estoy agradecido al Señor por todos estos años”.

Su hija, Sue Smith, que tiene 72 años, dice que su padre siempre tuvo un buen sentido del humor. “A él le encanta hacer chistes. Su mente es realmente muy rápida […]. Papá ha tenido una vida interesante. Ha sido un padre maravilloso”.

Franz camina un kilómetro y medio o a veces tres kilómetros todos los días y participa del club de ejercicios de su hogar de ancianos. Es el más anciano del grupo. El más joven tiene 70 años.

“Nadie puede decir que está por cumplir 100 años”, dijo su compañero de residencia Carl Bahr, quien trabajó junto con Franz en la sede central de la iglesia, en su caso, como tesorero asociado.

Franz también sigue conduciendo su automóvil, más que nada para llevar a su amigo médico misionero de 98 años de edad cuando este va a visitar dos veces al día a su esposa, que vive en un hogar de ancianos cercano y tiene 101 años. Hace dos meses, Franz aprobó el examen para conducir, que le permite seguir al frente del volante por otros cinco años. Aun así, dice que no crea que siga conduciendo por tanto tiempo.

Franz contrajo matrimonio en tres ocasiones, y en las tres, cumplió con la parte del voto matrimonial que dice “hasta que las muerte los separe”. Dice que disfrutó de cada uno de sus matrimonios, pero que ahora piensa seguir soltero.

Franz dice no tener ningún secreto para su longevidad, pero afirma que es vegetariano y cumple con el estilo de vida adventista. Cree que la observancia del sábado, ese día diferente de cada semana, lo ha ayudado. “Es una costumbre saludable, pero va mucho más allá. Cuando nos tomamos el sábado libre, estamos sirviendo a Dios”.

Como secretario de la iglesia en la década de 1970, tuvo a su cargo el departamento que era responsable de cubrir los cargos misioneros, en una era donde no era tan común que los líderes autóctonos asumieran la mayoría de los cargos de liderazgo.
“A diferencia del presente, en esos días, la tarea número uno era encontrar misioneros para las divisiones. Hoy día, las divisiones suelen buscarse su propio personal”, dijo.

Don Yost, que trabajó con Franz como fundador de lo que hoy se denomina la Secretaría de Archivos, Estadísticas e Investigación, dijo que Franz era “muy organizado, muy agradable y eficiente para cumplir con todo lo que había que hacer. Un muy buen compañero de trabajo”, dijo.

Franz nació el 1 de marzo de 1913 en el seno de una familia de misioneros de sostén propio en Camagüey (Cuba). En 1932 obtuvo un título de contaduría en el Colegio Superior Misionero del Sur, que hoy es la Universidad Adventista Southern.

A partir de allí, fue secretario-tesorero de varias asociaciones adventistas, lo que incluye a Alabama-Mississippi, Kentucky-Tennessee, Iowa, y la Unión de las Indias Occidentales Británicas. En la década de 1950, fue presidente durante dos años de la Unión Antillana, por entonces con sede en Cuba.

También fue secretario de la División Interamericana, con sede en Miami (Florida) entre 1954 y 1961, y entonces fue tesorero del mismo territorio hasta 1966.

En el Congreso de la Asociación General 1966 en Detroit (Míchigan), el compañero de colegio de Franz, el pastor Robert Pierson, fue elegido presidente de la Iglesia Adventista mundial. “Bob”, recuerda que le dijo bromeando durante una conversación informal en el sitio del congreso, “si alguna vez necesitas un conserje por allí, acuérdate de mí”. Una semana después, llegó “allí”, dado que solo cuatro horas después de ese encuentro fue designado secretario asociado de la denominación. Cuatro años después fue designado secretario.

A pesar de ello, en el fondo Franz es aún tesorero. Su pasatiempo favorito es administrar sus propias finanzas en un dormitorio adicional que ha convertido en un estudio, y que incluye una computadora y una fotocopiadora.

En anticipación de su cumpleaños de hoy, expresó: “No puedo ignorar la manera en que el Señor me ha dirigido y guiado a través de todos estos años. He sido bendecido más allá en forma inconmensurable”.

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