La Universidad Adventista del Plata, una institución adventista de la provincia de Entre Ríos (Argentina), recibió hace poco una certificación oficial como la primera “Universidad Saludable” en el país. La institución es la hora la primera de su clase en recibir ese título de parte de funcionarios de salud del gobierno en ese país sudamericano de 42 millones de habitantes.
En una ceremonia en la Facultad de Ciencias de la Salud de la institución que se llevó a cabo el pasado 16 de octubre, los líderes de la universidad y los principales funcionarios regionales de salud firmaron un documento que certifica la nueva designación oficial de la universidad. Los directivos dijeron que la medida marcó otro hito en los 116 años de vida de la institución, y su defensa de larga data de enfoque adventista abarcador y proactivo de la salud.
Durante la ceremonia, el Ministerio de Salud de Argentina estuvo representado, entre otros, por la doctora María Cristina Cipolla, coordinadora regional de Proyectos de Salud de la Secretaría de Promoción de Salud y Prevención de Enfermedades No Transmisibles; y por el doctor Hugo Cettour, ministro de salud de la provincia de Entre Ríos.
“Es un momento sumamente importante, dado que es la primera universidad del país que recibe este reconocimiento”, dijo Cipolla poco antes de firmar los documentos. “Lo que estamos por hacer aquí es tan solo un símbolo, porque sabemos que la obra que llevan a cabo en esta institución está mucho más allá de cualquier formalidad”.
Cettour dijo que se sentía “doblemente honrado” de participar en la ceremonia como ciudadano y como funcionario de gobierno.
“Durante muchos años hemos estado enfatizando la necesidad de trabajar con individuos sanos de manera de prevenir que se enfermen”, dijo Cettour. “Esta universidad es bien conocida por la calidad de los servicios de salud que brindan sus estudiantes y graduados en la región y aun más lejos”.
Los directivos de la universidad dijeron que si bien sienten que se alcanzó un hito, como dejó en claro el doctor Víctor Armenteros, vicerrector académico de la institución, la designación también entraña una gran responsabilidad.
“Este nuevo estatus nos proporciona un punto de referencia más alto, que nos esforzaremos por mantener”, dijo Armenteros. Al mismo tiempo, reconoció que el logro no se produce en un vacío, sino que es otro paso para que la institución y la iglesia promueven un enfoque abarcador de la vida sana.
El doctor Milton Mesa, decano de la Facultad de Ciencias de la Salud de la universidad, concordó con la apreciación de Armenteros.
“La institución no está sola en sus esfuerzos, sino que es parte de un sistema que hace los mejores esfuerzos para hacer bien a la gente, que lucha por seguir adelante en un ambiente que fomente el deseo de servir”.
La nueva designación cimenta la reputación del campus de la universidad como un lugar donde se lleva a cabo una educación para la salud no solo formal sino también informal. Al igual que en la mayoría de las instituciones educativas adventistas, un porcentaje significativo de alumnos, y del personal docente y no docente dedican parte de su tiempo a actividades físicas, de servicio y espirituales. El campus libre de alcohol y tabaco ofrece espacios abiertos y verdes, que motivan las oportunidades de reflexión y de oración.
El doctor Horacio Giménez, coordinador de Control de Enfermedades No Transmisibles de Entre Ríos, dijo que su objetivo es que otras universidades alcancen el mismo estatus. “Nos gustaría que comenzaran a promover un estilo de vida saludable no solo en el campus, sino también en las comunidades que las rodean”, expresó.
La Iglesia Adventista ha defendido por décadas un estilo de vida saludable, y la utilización de un ministerio abarcador de salud como una manera de compartir el amor de Dios con personas de todos los trasfondos sociales y religiosos.
La Universidad Adventista del Plata es una institución educativa para ambos sexos fundada en 1898 por inmigrantes europeos adventistas en las colinas de Entre Ríos, a pocas horas al norte de la ciudad de Buenos Aires, la capital del país. Durante décadas, la institución ha sido conocido como un semillero de profesionales y misioneros orientados al servicio, muchos de los cuales siguen prestando servicios en todos los continentes. La universidad cuenta con más de 2500 estudiantes provenientes de cincuenta países, y ofrece treinta carreras de grado y posgrado en ciencias de la salud, ciencias económicas, educación y teología.
—Oscar González colaboró con este informe.