Las graves inundaciones mataron a nueve personas durante marzo y afectó a uno de cada cuatro residentes en la zona de Trans-Cárpatos del oeste de Ucrania, informa Andrei Chuprikov, director de la Agencia Adventista de Desarrollo y Recursos Asistenciales (ADRA) en Ucrania.
La semana pasada Chuprikov visitado las zonas de mayores daños acompañado por Heriberto Muller, director de ADRA en la región Euro-Asia. "Muchas personas lo perdieron todo en la inundación, pero su entusiasmo y frente a la situación de fuerza", dice Muller. "Se va a recuperar lo que pueden y la reconstrucción."
Los voluntarios son de distribución de alimentos y medicamentos, bombeo de agua de las casas y limpiar los escombros. Además, los trabajadores de ADRA transportados a un grupo de niños sin hogar en Hungría, donde serán alimentados y cuidados hasta que sus familias tengan un hogar seguro otra vez.
Las aguas de inundación cubrió 255 ciudades y pueblos de Ucrania, dañando 33.774 casas y muchas carreteras y puentes. Los más afectados son las regiones de Beregovo y Vinogradov. A finales de marzo, 10.000 personas quedaron sin hogar. La inundación violenta rompió basureros y tumbas del cementerio, lo que resulta en el agua contaminada y la propagación de la disentería y otras enfermedades. Las áreas cercanas de montaña en Rumania, Hungría y Eslovaquia también informan de la destrucción de inundaciones importantes.
Muller dice que los agricultores de subsistencia en las zonas rurales Cárpatos mantener su cosecha anual de papa, col y otras verduras en pequeñas bodegas en sus casas. Cuando el agua inundó los sótanos, innumerables familias perdieron su principal fuente de alimentos hasta el verano. Muchos animales también murieron, y los campos que habían sido plantadas se sumergieron por completo. ADRA y otras agencias de ayuda esperan proporcionar alimentos de emergencia durante tres meses hasta que los cultivos de verano primero están listos.
Las fuertes lluvias, temperaturas más altas de la media, y la tala excesiva en los últimos años han provocado inundaciones frecuentes en los Cárpatos. Diez ucranianos murieron y 24.000 quedaron sin hogar en una inundación de 1998.