Piloto de Misión Adventista fallece en accidente aéreo en Indonesia

Misionero experimentado en África y el Sudeste Asiático, voló miles de horas para proyectos asistenciales

Sentani, Papua, Indonesia | Gay Deles/Kevin Costello/Teresa Costello

Un avión misionero de Aviación Adventista – Indonesia (AAI) piloteado por el veterano piloto Bob Roberts se estrelló esta mañana al despegar en la sede central de AAI en Papúa, cobrándose su vida y las de varios pasajeros que viajaban con él.

Los testigos dijeron que la aeronave, un Quest Kodiak, pareció tener problemas para despegar antes de estrellarse contra un puente al final de la pista. Los investigadores del accidente en el lugar aún tienen que determinar la causa oficial del accidente.

El trabajo de Roberts incluía distribuir alimentos, medicinas y artículos necesitados con urgencia, así como transportar pasajeros enfermos o necesitados desde y hacia muchas aisladas aldeas de montaña de Papúa. Era muy conocido en las islas, y había volado en más de mil misiones asistenciales.

Roberts y su esposa Jan, oriundos de los Estados Unidos, han trabajado para AAI allí en Papúa durante más de veinte años. Antes, el matrimonio había trabajado como misioneros en Etiopía, Tanzania y Zaire (hoy día Congo) entre 1976 y 1992. Tienen tres hijos adultos.

“Murió haciendo lo que más le gustaba hacer”, dijo Jan.

Roberts es recordado por Darron Boyd, coordinador de Misión Adventista y Evangelismo en Papúa, como alguien que llevó esperanza en su pequeña aeronave a los que estaban en zonas remotas. A pesar de las condiciones a menudo extremas del terreno que transformaban su labor en un gran desafío, Roberts amaba la misión. “Si están realmente enfermos […], los llevamos gratis”, dijo en un informe de video de Misión Adventista producido el año pasado. “Esas son las cosas que me hacen feliz de ser un piloto misionero. Ayudar a gente que de otra manera no tendría esperanza. Para eso estamos aquí”.

Jonathan Kuntaraf, director del departamento de Escuela Sabática y Ministerios Personales de la Iglesia Adventista mundial, dijo que se sentía triste por el fallecimiento de Roberts, que trabajaba en su país de origen. “Él y su esposa son gente muy dedicada. Juntos trabajamos para reunir dinero para educar a los niños marginados de Papúa. Por favor, oren por la familia durante esto momentos difíciles y de grandes desafíos”.

Si desea ver el video de la obra misionera de Bob en Papúa, visite este enlace y presione en “Called to Fly”: www.adventistmission.org/dvd. 

El estadio indonesio de Papúa tiene dos millones de habitantes y veinte grupos lingüísticos. Allí también está la sede de la Unión Asociación de Indonesia Oriental, que cuenta con 763 iglesias y más de 101 mil miembros de iglesia.

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